Yo, como la mayoría de gente de mi quinta, me la tragué entera, y por eso, todavía hoy (veinti tantos años después) sigo imaginando los glóbulos rojos como peregrinos con mochilas cargadas de burbujas de oxígeno, o a los blancos como antidisturbios que luchan contra los malvados (y feos) virus. Sea como fuere, está claro que con aquella seria, conseguí entender muchas cosas sin esfuerzo.
Pues bien, he aquí una versión postmoderna y viral de aquel experimento televisivo que flota en la Red.
Algo así como "Érase una vez... Internet".
No hay comentarios:
Publicar un comentario